¿Qué buscamos en un Hogar?
Cuando nos golpeamos o nos pasa algo malo de pequeños, queremos a mamá y papá, ¿no?
Si ya estamos con ellos y nos encontramos en algún lugar desconocido o tenemos miedo, queremos ir a casa.
Lo que de niños no sabemos de manera "consciente" es que realmente lo que queremos, es ir a nuestro Hogar, ese lugar donde nos sentimos, seguros, cómodos y en calma.
La palabra "Hogar" proviene del lugar donde se encendía el fuego, alreadedor del cuál se reunían las personas para calentarse y alimentarse. Hogar significa Punto de Convergencia (del latín “Focus”) y su etimología, desde otras raíces linguísticas, nos remite a palabras como “Brillar”, “Luz” y “Faro”. Es decir, el Hogar nos puede brindar unión, claridad, orientación, guía.
¿Y qué tiene que ver esto con la Epigenética Conductual?
Simbólicamente es una invitación a conectarse con otras personas y con nosotros mismos. Desde este estado de seguridad y calma es cuando dejamos de reaccionar, comenzamos a reflexionar y a observarnos!
Y solamente con ese “observar” ya estamos influyendo e impactando sobre nuestra expresión genética (ver el post: Prestar Atención, el primer paso a la Consciencia). Con tan sólo enfocarnos en nuestro Hogar, en nosotros mismos, comenzamos a hacer consciente lo inconsciente.
¡Bienvenidos a su nuevo Hogar!